lunes, 26 de diciembre de 2011

The Path (Do). Endo sensei.

Do them flexibly and gently like the flow of water;
Sense the partner's feeling and come to know the next movement.
Connect with the partner's ki as it connects to you, and help each other to develop.
In kokyu techniques, one must grasp the continually changing "Now", and hamonize
With and reconcile every thing that is around.
That is what it is to know The Path, "Do".

S.Endo

Empieza la temporada 2012.

sábado, 24 de diciembre de 2011

Notas de los discípulos de Miyamoto Musashi.

1. Estirarse, estancarse, endurecerse recogiéndose, contraerse, cerrarse sobre sí mismo, esos estados coartan la libertad de acción.
Si se endurece , será como el agua que se hiela. Si se cierra sobre sí mismo, no podrá desplazarse bien. Hay que diferenciar entre "apretar" el vientre ciñéndolo como un cinturón y "apretar" el cuerpo, que es un estado negativo. Si se relaja por pereza caerá, en un estado de debilidad.
Cada vez que se pone en pie, los sables en mano para el entrenamiento, ha de ser sensible al estado de su energia vital y de su cuerpo a fin de estar bien distendido para ponerse en el estado del agua, y hacer fundir el hielo. De este modo el cuerpo estará completamente libre.
2. Ni en la mente ni en la energía vital debe haber fallo. Un fallo es un vacío causado por un corte (de la percepción). Un verdadero adepto no presenta este tipo de fallos. Quienes no lo son presentan más o menos fallos según su nivel. Es necesario examinar bien el propio estado para eliminar los grandes fallos. Es signo de entrenamiento y reflexión ser consciente del problema del fallo. Un verdadero adepto capta, en su adversario, el menor signo de fallo en la mente y la energia, y vence sin dejar escapar el momento en que éste es vulnerable. Este fenómeno sólo resultará extraño a los que ignoran la via de la estrategia.
Quien no se entrene lo bastante no encontrará el fallo de los demás . Aunque lo percibiera, no podría vencer penetrando en este fallo. Quién persevera durante mucho tiempo, sabe lo que es la derrota debida a un corte (de la percepción) y sabe redimir su propia falta.
3.Si se entrena moviéndose con vivacidad al comienzo del entrenamiento, es porque no sabe desplegar su energía de forma tranquila. Por eso depende del estado de la persona. Hay que saber que le resultará muy difícil examinar el principio de la mente si agita rápidamente el cuerpo.
4. Es importante que se calme y que elabore la manera en que domina su propia mente y cómo la energía vital emana de usted. Sin embargo si le falta seriedad cuando se sitúe en estado de calma, su mente, su energía y su cuerpo se dormirán y debilitarán. Tendrá la energía y el cuerpo de un muerto.

[. . . . . . . . . .]

viernes, 16 de diciembre de 2011

Cuarenta y dos instrucciones sobre estrategia . Miyamoto Musashi.

Hacer los gestos adherentes.

Tanto usted como su adversario atacan; en el momento en que el adversario bloquea su sable, se le acerca y adhiere su sable al de él. Hay que hacer que el sable se adhiera como si no fuera posible despegarlo, pero sin demasiada fuerza. Para hacer que sus gestos sean adherentes, toda calma será poca. Hay que distinguir entre adherir e incrustar. Adherir es fuerte, incrustar es débil.

jueves, 15 de diciembre de 2011

Miyamoto Musashi

"La mente no debe estar ni sombría, ni agitada, ni pensativa, ni temerosa, sino recta y abierta. Esa es la actitud mental que hay que perseguir. La voluntad no debe ser pesada, pero el fondo de la conciencia debe serlo, así hará que su mente se parezca al agua que reacciona de forma apropiada antE situaciones de movilidad . Tanto si es una gota como un océano en la profundidad azul verdosa, es agua. Hay que examinar bien esto."
" La rapidez no forma parte de la verdadera vía de la estrategia. Cuando decimos rápido, es que ha habido un retraso en relación con la cadencia de las cosas, eso es lo que quiere decir rápido o lento. Cualquiera que sea el ámbito, los gestos de un buen adepto no parecen rápidos. Por ejemplo, hay Correos que recorren corriendo cuarenta o cincuenta leguas en un solo día, pero no corren con rapidez de la mañana a la noche. Sin embargo un principiante no puede correr una distancia tan larga, aunque por su aspecto parezca que es capaz de correr durante todo el día. En teatro nô, cuando un principiante canta siguiendo a un buen adepto, tiene la impresión de estar retrasado y canta con la sensación de apremio. Así mismo cuando se toca el tambor de Pino Viejo (Oimatsu), que es una melodía lenta, un principiante tiene la impresión de retrasarse y de tener que recuperar. Takasago es un canto más bien rápido, sin embargo, no es conveniente repiquetear con rapidez. La rapidez es el comienzo de una caída, porque produce un desfase en la cadencia. Por supuesto demasiada lentitud también es mala. Los gestos de un buen adepto parecen lentos, pero no hay espacio muerto entre ellos. Cualquiera que sea el ámbito, los gestos de un experto no parecen nunca apresurados. Mediante estos ejemplos, tiene que comprender un principio de la vía."

domingo, 11 de diciembre de 2011

Seminario de Endo sensei , Granada 2011, por Luis Rodriguez 2º dan Aikikai


El maestro ha insistido mucho en que durante la práctica miremos hacia nuestro interior. Con los ejercicios básicos de suburi, por ejemplo, cómo nos sentimos cuando los hacemos, qué cambia cuando los hacemos solos o con un compañero. Para él la manera más efectiva llega cuando estamos totalmente serenos y tranquilos. Esto, junto con el timming adecuado, es todo lo que necesitamos.

No utilizar fuerza alguna. El maestro ha dicho que se había propuesto no cansarse durante este curso. Creo que lo ha conseguido. Y, sin embargo, no ha parado de entrenar con todos más intenso que nunca. Tras un buen rato con alguna técnica o ejercicio nos preguntaba, con una gran sonrisa, cómo nos sentíamos, en qué estado estaba nuestro cuerpo y nuestra mente. Nos invitaba a llevar estas sensaciones y formas de actuar a cualquier otro ámbito de nuestra vida y fuera del tatami.

Creo que hemos conseguido entrar en la dinámica que pedía. La práctica ha sido fluida e intensa. Tras 16 horas de entrenamiento en pocos días claro que el cuerpo está cansado. Pero uno siente que está activo y sereno. No te duelen las muñecas ni los codos por forzadas proyecciones. La mente capta más cosas. Notas que la fuerza desaparece de los hombros. Cada vez estas más ágil y rápido, pero también más pesado y equilibrado. Como también dijo Endo Sensei cada “ahora” es lo importante, y con una práctica así puedes llegar a verlo y vivirlo plenamente. Todo cambia en cada “ahora”, hay que conseguir serenar nuestro interior y nuestro cuerpo y ser capaz de sentirlo. Estar al cien por cien en cada instante.

En la última parte del curso (yudansha) el maestro no ha entrado en complicadas técnicas o largas explicaciones. Sencillos ejercicios o técnicas eran suficientes para mostrar toda la riqueza que puede alcanzar nuestro aikido. Da que pensar que el maestro insista tanto en estos puntos tras 50 años entrenando. Todo el que se lo haya tomado en serio y haya seguido al maestro en lo que nos proponía, el seminario ha tenido que dejarle buenas sensaciones. Sentir, moverse y transmitir como lo hace Endo Sensei o sus alumnos más avanzados. Eso es lo que yo busco. Si el budo es parar la agresión o la violencia. Es traer la Paz y e Amor en todo lo que hagamos, este aikido es sin duda un budo.